La colombiana, que llegó a la Ciudad Condal por amor, puede que se quede por su maternidad...
En enero de 2011, Shakira confirmó su ruptura con Antonio de la Rúa, su novio y representante, tras once años de relación. El año anterior, en mayo, la colombiana viajó hasta Barcelona para grabar el videoclip de «Waka Waka». Ahí conoció a Gerard Piqué. En Sudáfrica, durante el Mundial, la cantante volvió a encontrarse con el blaugrana. Y luego, en agosto, de nuevo un videoclip en la capital catalana. A Shakira le gustó Piqué, le gustó Barcelona.
Tanto le gustaba que Shakira, que siempre se hospedaba en el Hotel W cuando viajaba ya fuera por algún concierto o para ver a su hermana Lucy, una neurocirujana que lleva años en la ciudad, optó por, en el verano de 2010, alquilar la casa del nadador David Meca, en Bellaterra. La estancia requería de mayor privacidad.
Fue el principio de una mudanza anunciada. Y Shakira lo confirmó en enero. Junto a su ruptura, anunció que se mudaba a Barcelona para darle mayor proyección a su carrera en Europa. Finalmente lo hizo a la casa que había alquilado el verano anterior al nadador español. Los paparazzi se dieron a la caza de una fotografía que confirmara que la colombiana y Piqué estaban juntos. Piqué lo ratificó días después de su 24 cumpleaños. En mayo de 2011 se demostraron su amor en el concierto de la colombiana en el Estadio Olímpico de Montjuic.
Muestras de amor
El Barcelona celebraba la Champions y la cantante se declaraba catalana en catalán, lengua que sigue aprendiendo. Villa, Piqué, Pedrito, Xavi, Bojan y Busquets bailaron al ritmo del «Waka Waka» para deleite de los fans. «Estoy loca con mi Piqué, loca, loca, loca» se declaraba cambiando las letras de su canción.
Este 2012 la pareja tuvo una crisis a raíz de las constantes visitas de la modelo israelí Bar Refaeli a la ciudad. Los viajes de Shakira durante la Eurocopa a Polonia la acabaron por descartar. La cantante incluso alquiló un estudio privado allí para no quitarle el ojo de encima a Piqué, sin dejar ella de trabajar.
Un tercer vídeo filmado en Barcelona este verano confirmó su romance con la ciudad. La compra de una casa en Esplugues, a cinco minutos del Camp Nou, dio nuevas alas al romance con Piqué y desató los rumores de un posible embarazo. Si ellos no lo confirman, tal vez lo termine haciendo alguien de su círculo cercano, como lo hizo sin querer un despistado Juanes en una entrevista. De hecho, Divier y Maritza, dos empleados que llevaban trabajando para la cantante más de diez años, la amenazaron con publicar información e imágenes después de que los despidiese. Los exempleados piden 150.000 dólares. La colombiana los ha demandado por chantaje y difamación.
Si la pareja va a tener un hijo, la relación de Shakira y Barcelona se prolongará. La incógnita es si la cantante ama tanto la ciudad como para que el bebé, que podría llamarse Ulises, nazca aquí o en Miami, lugar donde se hospedaba antes de enamorarse de Piqué y de la Ciudad Condal.
Ella está en París
Piqué demostró que a la pareja le gusta jugar con las redes sociales al colgar la foto que confirmó su relación. Esta semana, la cantante desmintió el rumor de que se encontraba en Puerto Rico, desatado por un diario local, para ver el partido de la selección. La colobiana publicó en Twitter una foto con una amiga en París. Allí, tabién ha visitado el museo d'Orsay.
ABC
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